Ojeda le atajó un penal a Tonelotto, otra vez fue la figura de River y es el arquero de mejor puntaje en el Apertura.
A pesar de su metro setenta y nueve de altura, Juan Marcelo Ojeda cada fecha se agiganta más en el arco de River. En apenas una semana, no sólo se consolidó como el mejor jugador del equipo en el Apertura sino que además se convirtió en el arquero de mejor promedio Olé del campeonato. Ayer, a pesar de la derrota, volvió a destacarse: atajó un penal, ahogó dos posibles gritos de gol de San Martín y no tuvo responsabilidades en el golazo de Brusco.
Tras la marcha de Carrizo a Italia, el ex arquero de Rosario Central disipó las dudas que se generaban en torno a su titularidad y aprovechó la oportunidad que le dio Passarella: se hizo cargo de un puesto vacante y rindió. Ayer, a pesar de que protagonizó una salida en falso al minuto de juego y que casi termina en un gol de cabeza de Brusco, Ojeda no perdió confianza en su juego y se fortaleció. Y entonces, a los 9 minutos del primer tiempo, empezó a sobresalir: García buscó con un centro a Tonelotto y el cabezazo del delantero murió en los guantes firmes del arquero. Pero no sólo se destacó con sus tapadas: además, fue importante por su concentración y sus saques precisos, uno de ellos muy bien capitalizado por Ferrari.
Con River errático en el fondo, Ojeda volvió a ser clave a los 37 minutos, otra vez ante un frentazo de Tonelotto que amortiguó con sus manos. Pero faltaba lo mejor, y sucedió en el minuto 45: el árbitro Beligoy vio mano intencional de Falcao en el área de River y Ojeda, nuevamente, tuvo que solucionar el problema: intuitivo, esperó el remate fuerte y al medio de Tonelotto y desvió el penal con su pierna izquierda.
Cuarto mejor jugador contra San Lorenzo, figura en Jujuy y en San Juan, Ojeda ya es un alivio para el Kaiser. El arco, al menos, está en buenas manos.
SAN JUAN (E. ESPECIAL).
Por Ole.com.ar
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